El cristo de palo, obra de algún imaginero tosco allá en los tiempos de dos misas diarias y cuatro cuaresmas al año, enfilaba una vez más la calle mayor. Tantas veces se amontonaban en su memoria carcomida los mismos hechos que ya no distinguía a los actores, confundidos en la misma marea humana que cada primavera, cuando la luna llena clarea las noches aún frías, se empecina en sacarle de su capilla recoleta y su sueño secular para pasearle calle arriba calle abajo. Unos con caperuzas que quieren asaetar estrellas pero que solo enturbian con las túnicas su reflejo en los charcos. Otros apostados a su paso, cargados de rosarios y escapularios, luchando con el prójimo por rozar al pobre cristo aterrorizado por la histérica fe. Mujeres en los balcones pregonando su pena a gritos mientras otras, más contenidas, lloran arrobadas al ver la cara del redentor. Éste, mecido por cien hombros al unísono, mareado, ve como la procesión tuerce por el cantón que cada año que pasa parece estrecharse más. De las ventanas mil manos se lazan a tocarle, pegados a la pared devotos idos rasgan sus ropas desconsolados. Flota al fondo el bullicio de las tabernas llenas de gente apurando sus cálices, dulces o amargos. Niños con exceso de vitaminas zumban por todos los lados, los tambores tocan a muerto, los clarines a guerra santa, penitentes en carne viva van dejando un rastro de sangre y la veleta del campanario gira loca. Todo recae sobre los tristes hombros del cristo de palo, que mirando hacia el pequeño lienzo de cielo que permite el apretado caserío pregunta:
Dios mío, Dios mío, ¿qué he hecho yo para merecer esto?
8 comentarios:
Hola Chafar!
Tú siempre del lado de los humildes. Llevo siglos proponiendo a los cofrades que dejen al Cristo fijo, para poder tocarlo cualquier día del año, sin colas ni sobresaltos. Pero no me hacen caso, dicen que es mejor gastar todo el fervor en un día, que andar doce meses con las penas a cuesta.
Lo que pasa amigo Serio es que viste más dar la nota en la calle mayor que en una capilla donde no te ve nadie
¡Qué arte tienes, niño! Esto es un post con estilo, y lo demás son tonterías. Un saludo.
Muchas gracias, artista!!
Y lo bien que sienta una saeta de un gitano en tol puto oido, umm musica para mis oidos
Estoy convencido de que ésas mismas serían las últimas palabras de Cristo si viviera hoy. No en vano, Él estaba en contra de iconos y exaltaciones del tipo que todos los santurrones de hoy en día celebran a tutiplen. Pero claro, si alguno de sus fieles seguidores hubiese vivido en el siglo III, sus doctrinas se situarían entre los cristianismos derrotados en el Concilio de Nicea.
@ Kalifer
Ayyyy lo que tenemos que pasar para ganar la vida eterna.
@ Daemonicus
Ese no fue el famoso concilio donde la divinidad de Jesús solo ganó por un voto mientras los soldados del emperador hacían desaparecer a los que querían votar en contra. Y ahora la Iglesia nos quiere dar lecciones.
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