Está claro que la investigación y el desarrollo son unas de las claves para salir de la crisis. La búsqueda de nuevos conceptos económicos y comerciales para incentivar el consumo y la creación de sinergias con las que dinamizar el comercio tradicional están en la base de esta rompedora propuesta empresarial: el sex shop marisquería.
Sabedores del amplio lecho de mercado que tienen los amantes de los placeres de la carne, sumados a los amantes de los placeres del pescado, este establecimiento está en situación de hacer gozar a gran parte de la población, ora con el consolador, ora con el mejillón.
Aquí podrá comprar afrodisiacos definitivos hechos con esencia de quisquillas, kits para noches de pasión con picardías color salmón, tanga con sabor a almejas a la gallega, condón sabor camarón y dos docenas de gambas a la plancha para abrir boca. También podrá experimentar con variantes de las bolas chinas a base de materiales más orgánicos y dúctiles como los langostinos con gabardina o echar un polvo salvaje en una bañera llena de percebes. Para los que le va más el sado, déjese trabajar los pezones por las sensuales pinzas de las cigalas o ábrase a los placeres anales de la mano de las navajas.
Como decíamos, un sabroso futuro le auguramos a este rompedor negocio, y animamos al resto de pequeños y medianos comercios a seguir el ejemplo, pues es opinión general que en las grandes superficies se folla más. Así, en un futuro cercano, podremos ver puti-panaderías, sex shop pollerías o mercerías casas de citas y ofrecerle un plus al cliente que a la hora de hacer las compras quiere darle una alegría al cuerpo.
9 comentarios:
Es la imaginería empresarial que no cesa, como debe ser. Y en este caso con toda la razón: el marisco y el sexo van íntimamente unidos. Genial.
Tienes razón, que los dos están para chuparse los dedos.
Jo, cómo cambian los tiempos. Antes se decía eso de "hacer a pelo o a pluma" pero ahora debe ser algo así como "¿qué ta va más, la merluza o el centollo?" "¿o mejor una sopa de marisco?" (en plan cama redonda).
Anda que como alguien se equivoque y se la endiñe a un centollo...
Tú ríete pero es que hay gente para todo, en serio.
@ Pam:
Mejor una zarzuela de mariscos, que ahí sí que hay promiscuidad
@ noveldaytantos:
En ese caso pondríamos los hechos en conocimiento de la protectora de animales para que castigue al zoófilo con todo rigor, como por ejemplo, obligarle a fornicar con seres de su propia especie
Hombre, qué mejor que una casa de cita para comer marisco fresco...
Y se cita uno al alimón con la amante y con los langostinos.
Original, vaya que ha sido. Una buena excusa para pasarte y comerte un marisquito fresco de primera.
Publicar un comentario