El glorioso ejército español, perfecta cristalización de las
virtudes patrias, tiene como punto de lanza a la invicta legión, fuerza de
choque cuya sola mención levanta pavor entre nuestros enemigos y admiración
entre amigos y parientes. Pero corren malos tiempos para el caballero
legionario. Tantos años en paz, sin un mísero enemigo al que echar el guante,
les ha pasado factura, tanto que se están poniendo fondones y el mando ha
decidido ponerlos a dieta.
Ni que decir tiene que es una mala noticia para todos
nosotros. Hace siglos que el ejercito dejó de ganar batallas fuera de sus
fronteras, por lo que se han dedicado al más tranquilo trabajo de acallar al
enemigo interior, y justo ahora que la sacrosanta unidad de la patria vuelve a
estar en peligro resulta que están torpes para maniobrar. Salen desafectos
hasta de debajo de las piedras y las lorzas les impiden verlos. Menos mal que
nuestros múltiples enemigos difícilmente se pondrán de acuerdo para atacar al
alimón mientras la legión está en la operación bikini.
Nueve de cada diez dietistas consultados por Repámpanos
recomienda acciones de guerrilla urbana, desembarcos a cara de perro o marchas
de sol a sol por los Monegros para quitarles barriguita a nuestros chicos, que
de novios de la muerte han pasado a amigos del bocata de calamares. No nos
explicamos como gente de orden puede tener una alimentación tan desordenada.
Confiamos en su contrastado patriotismo en estos momentos tan delicados para la
nación y en que sus mandos naturales los metan en cintura. Para ello nada mejor
que seguir el ejemplo de su mascota, que parece ser la única frugal del cuartel.
6 comentarios:
Ah, esas camisas abiertas hasta el ombligo, ese gesto chulesco mirando a la derecha al desfilar, esa cabra que va delante sin enteder nada... España y yo somos así, señora.
Pobres. Van a tener que ganarse el sueldo haciendo ejercicio. Otra burla más del destino...
No me creo que se alcancen los objetivos prometidos. Creo que ésto de ponerlos a hacer ejercicio es pura mariconería si se me permite tan burda expresión.
¿Acaso los viejos Tercios en los tiempos heroicos no bebían, comían, fumaban, se drogaban y follaban hasta quedar exhaustos? Cierto es que la mala alimentación hacía cualquier cosa y en todo caso como se decía "más cornás da el hambre" y aquella gente procedían del lumpen proletariado más hambriento, pero tampoco en estos tiempos el rancho del cuartel está supervisado por Ferrán Adriá o los de Can Roca o sea que la propuesta va a estar condenada a un más que seguro fracaso. Quizás es que la Legión ya está más que pasada y se requieren otro tipo de mentalidades para tiempo de drones y misiles Tierra/Aire.
¿Será posible lo que veo? Esto desanima a cualquier patriota entusiasta. ¿Dónde vamos a parar si ya no son dignos de confianza ni la legión?
@ Rick:
solo falta que los animalistas les acusen de estresar a la cabra y tengan que desfilar con un peluche.
@ Doctor Krapp:
mucho me temo que va a ser misión imposible reducir su perímtro de cintura, a no ser que se dediquen a la caza de separatistas, izquierdosos y otras gentes de mal vivir.
@ Utopia:
tranquila, los doscientos y pico generales que mantenemos en nómina seguro que tienen un plan de contingencia, que para eso les pagamos.
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